El milagro de Thiago: el joven que sobrevivió a una caída desde un sexto piso

Thiago, un joven de 17 años que celebraba su viaje de egresados en Bariloche, sufrió un accidente que paralizó a su familia y amigos. El 28 de agosto, cerca de las 5:50 de la madrugada, cayó desde el sexto piso de un edificio. El impacto fue devastador: su estado de salud era tan delicado que pasó días internado sin despertar.

Desde Rosario, su ciudad natal, su familia emprendió el viaje hacia la ciudad patagónica, esperando lo peor. Lo que parecía una tragedia sin retorno, terminó en un milagro.

Hospital en Bariloche a la recuperación en Rosario

Tras varias intervenciones quirúrgicas y días de incertidumbre, Thiago fue trasladado a Rosario, donde continuó su tratamiento. Los médicos lo operaron en varias oportunidades, mientras sus padres no se separaban de su lado. Este jueves, contra todo pronóstico, le dieron el alta.

Ailén, la madre del adolescente, compartió los detalles de esta odisea familiar. "Estamos tranquilos y contentos. Es un milagro, desde el momento cero fue un milagro. Nadie que cae de un sexto piso puede vivir. Todavía no podemos creer todo lo que pasó. Desde el accidente hasta la recuperación, todo fue increíble", relató emocionada.

Ailén recordó con angustia el momento en que se enteró del accidente: "Me llamaron a las 7 de la mañana para decirme que había tenido un accidente. Me subieron a un vuelo a las 11, pero fue una eternidad. Llegué en dos horas, pero sentí que no llegaba más. Fue tremendo".

El diagnóstico inicial no dejaba lugar para el optimismo. "Al principio pensé que se había caído desde un primer piso. Recién a las 10:30 me dijeron que había sido del sexto. No sabía con qué me iba a encontrar", confesó Ailén.

La recuperación de Thiago: operaciones, reflexión y futuro

"Lo operaron tres veces. Primero de la rodilla y la cara, una cirugía que duró 10 horas. La última intervención fue en el pie, este miércoles. Ahora estamos en casa y él está bien, animado. Siempre estuvo acompañado, nunca lo vi angustiado ni deprimido, ese era uno de mis mayores miedos", explicó la madre del joven.

Thiago, quien no recuerda mucho del accidente, enfrenta el futuro con ganas de superarse. "Es un chico muy responsable. Nunca se llevó una materia, tiene excelentes notas y se despertó preocupado por quedarse libre en el colegio", señaló Ailén, visiblemente orgullosa de su hijo. A pesar de que pasarán meses antes de que pueda volver a clases, Thiago ya tiene claro su próximo objetivo: estudiar Ingeniería Electrónica.

La mamá, entre el agradecimiento y la reflexión

Ailén, quien trabaja como enfermera en el Sanatorio Parque de Rosario, aseguró que ni su experiencia profesional la preparó para enfrentar una situación así. "No hay forma de estar preparado para algo así, aunque entendí muchas cosas de su estado de salud", reflexionó.

La madre del joven también expresó su agradecimiento hacia la empresa que organizó el viaje de egresados: "No puedo decir nada malo de la compañía, con nosotros se portaron excelente. Nos dieron vuelos, comida, alojamiento y los traslados. Por más que hubiera estado allá, no podría haber evitado lo que pasó. Thiago salió por la ventana sin pensar, intentó agarrar algo y cayó. Fue un milagro que despertara tan rápido", explicó.

Finalmente, Ailén compartió una reflexión profunda: "No busco respuestas, quiero disfrutar y agradecer a Dios y a los equipos médicos que mi hijo está vivo. No puedo enojarme. Pensé que estaba borracho, pero los análisis toxicológicos dieron negativo: no tenía ni alcohol ni drogas en sangre". La madre recordó con ternura el momento en que recibió las pertenencias de su hijo: "Se había gastado 170 mil pesos en chocolate para nosotros. No puedo enojarme con un chico de 17 años".

Thiago ha vuelto a casa, y aunque el camino hacia su recuperación completa será largo, la historia de su caída y milagrosa supervivencia ya se ha convertido en un testimonio de esperanza para muchos.