Amenaza a Di María y promesa de "4 palos" por un "laburito"

Pablo Acotto y su prima Sara Gutiérrez fueron imputados por la nota dejada frente al barrio Miraflores y las detonaciones realizadas.

Policiales04/04/2024Studio341NewsStudio341News
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Las amenazas dirigidas a la familia del destacado futbolista Ángel Di María han provocado un revuelo internacional. Las ciudades de Rosario y Funes se vieron repentinamente en el centro de la atención mediática luego de que dos individuos a bordo de un Renault Megane dejaran una nota en el barrio privado Miraflores, seguida de al menos un disparo al aire.

El 25 de marzo, pasadas las 1 de la madrugada, Pablo Ezequiel Acotto y su prima, Sara Belén Gutiérrez, fueron señalados como responsables de este preocupante incidente, presuntamente ejecutado bajo la orden de "gente de arriba", según los relatos de Acotto a su pareja, a cambio de una promesa económica significativa. Ambos individuos fueron formalmente imputados y permanecen bajo custodia mientras avanza el proceso judicial.

El fiscal Pablo Socca, a cargo de la investigación, señaló en la audiencia imputativa que el objetivo del acto era sembrar el temor y generar conmoción en la población, destacando la elección de una figura pública de renombre como blanco del ataque, en este caso, Ángel Di María, y la mención del gobernador de la provincia, Maximiliano Pullaro, en la nota dejada en el lugar del incidente. 

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Sin embargo, la trama parece tener raíces más profundas. Acotto, días antes del suceso, había mantenido una conversación telefónica con su pareja, Tamara León, quien posteriormente fue detenida en relación con una causa de drogas. En dicha conversación, mencionó la necesidad de realizar un "trabajo discreto" por el que le ofrecieron una suma considerable de dinero. Este hecho, junto con otros detalles surgidos de una investigación federal previa, arrojan luz sobre la complejidad del caso.

El relato se intensifica con el avistamiento de Acotto y Gutiérrez en la localidad vecina de Funes, donde fueron observados por la Guardia Urbana, aunque el Renault Megane que utilizaban no fue localizado. Se descubrió posteriormente que el vehículo estuvo en una estación de servicio de la zona, donde los ocupantes dejaron caer una bala que luego sería encontrada por el personal.

Después del incidente contra la familia Di María, Acotto se refugió en un domicilio en San Luis y Moreno, donde fue finalmente detenido junto con su prima cuando intentaban escapar de la ciudad. La evidencia recopilada, incluyendo grabaciones de cámaras de seguridad, fue crucial para su captura.

La investigación continúa en curso, con el objetivo de determinar la autoría intelectual detrás de las amenazas contra Ángel Di María y su familia, así como de esclarecer el posible vínculo de Acotto con actividades delictivas relacionadas con el narcotráfico en la localidad de Pérez.

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