Chris Hoy: el campeón británico que enfrenta un duro golpe en su vida personal

El destacado ciclista británico Chris Hoy, ganador de seis medallas de oro en los Juegos Olímpicos y once veces campeón mundial, ha generado una gran conmoción en el mundo del deporte al revelar que padece cáncer terminal.

En una emotiva entrevista con el medio británico The Sun, Hoy, de 48 años, compartió su experiencia: “La historia comienza con una frase que te acaba de decir una persona que nunca habías conocido. Y en el espacio de una frase, solo una colección de palabras, todo tu mundo se ha derrumbado”. Añadió que el año pasado fue diagnosticado con cáncer, un momento que lo sorprendió profundamente, ya que no había presentado síntomas previos. “Actualmente estoy recibiendo un tratamiento que incluye quimioterapia, que afortunadamente va muy bien, pero son más bien administrativos (debido a que es terminal)”, expresó.

El diagnóstico de Hoy llegó a fines de 2023, cuando le detectaron cáncer de próstata, que lamentablemente hizo metástasis en la pelvis, la cadera y la columna.

A lo largo de su ilustre carrera, Hoy ha cosechado seis medallas de oro en los Juegos Olímpicos —una en Atenas 2004, tres en Beijing 2008 y dos en Londres 2012—, además de una medalla de plata en Sídney 2000 y once campeonatos del mundo entre 2002 y 2012.

Sin embargo, la tragedia no se detiene ahí. Hoy también reveló que su esposa, Sara, fue diagnosticada con esclerosis lateral amiotrófica incurable, con muy poco tiempo de diferencia: “Hay días en los que puede tener dificultades para completar tareas cotidianas simples, como colocar una llave en la puerta”, comentó.

A pesar de la adversidad, Hoy destacó el optimismo de su esposa, quien intenta encontrar un lado positivo en la situación: “Ella dice todo el tiempo: ‘Qué suerte tenemos. Ambos tenemos enfermedades incurables para las que existe algún tratamiento. No todas las enfermedades tienen ese tratamiento. Podría ser mucho peor’”.

Por último, el ciclista británico reveló que sus hijos, Chloe y Callum, de siete y diez años respectivamente, aún no tienen conocimiento de las enfermedades que él y su esposa enfrentan, dejando un manto de protección sobre su infancia en medio de esta dura realidad.