Fatal Balacera en zona norte: murió uno de los heridos y son dos las víctimas

El luto se cierne una vez más sobre el barrio Casiano Casas de Rosario, tras el fatídico desenlace de un ataque a tiros que cobró la vida de un joven este martes. Leonardo Rodrigo Contreras, de apenas 23 años, sucumbió a las heridas provocadas por los disparos, confirmándose su deceso en las primeras horas del miércoles.

Este suceso, enluta a la comunidad rosarina sumándose a una lista ya demasiado larga de tragedias similares. Según informes del Ministerio Público de la Acusación (MPA), el trágico incidente tuvo lugar cerca de las 16:45 horas, en Ghiraldo y Cavia. Dos individuos aún sin identificar, a bordo de una motocicleta cuyas características se resguardan para no entorpecer la investigación, perpetraron un violento ataque contra tres personas que se hallaban en el lugar, sin mediar palabra alguna. La escena se convirtió en un caos de balas y desesperación, dejando como saldo la pérdida de una vida y a otros dos heridos, entre ellos M.C.P, de 43 años, quien aún lucha por su recuperación en el hospital.

El equipo criminalístico ha sido desplegado para preservar la escena del crimen, recabar evidencias, testimonios de testigos y vecinos, así como para realizar pericias que puedan arrojar luz sobre este triste episodio. El traslado de las víctimas al Instituto Médico Legal (IML) ha sido ordenado para la realización de autopsias y otras diligencias pertinentes.

Este nuevo episodio de violencia en Casiano Casas no hace más que ahondar en la preocupación y el dolor de una comunidad que ya ha padecido demasiado. La zona, cercana a un punto de venta de drogas señalado reiteradamente por vecinos y autoridades, ha sido testigo de diversos actos violentos y crímenes en los últimos años.

Las investigaciones, dirigidas por el fiscal Luis Schiappa Pietra, se intensificarán en la Unidad de Homicidios Dolosos, con la esperanza de esclarecer este y otros casos pendientes que podrían tener alguna conexión con los sucesos ocurridos en el barrio. Es imperativo que la justicia actúe con celeridad y eficacia para brindar algún consuelo a una comunidad que clama por paz y seguridad.